En 1990, el Poder Ejecutivo declaró el 8 de octubre Día Nacional del Patrimonio Natural y Cultural Argentino mediante Decreto N° 2033/1990 con el objetivo de fomentar en la sociedad la reflexión sobre el legado cultural y patrimonial que va dejándose en el territorio argentino generación tras generación.
El patrimonio natural y cultural puede ser de diferentes índoles , históricas, sociales y testimoniales; artísticas, arquitectónicas o de significación urbana, paisajística o ambiental. Y estos valores, además, deben ser dimensionados en función de la escala del entorno en que se insertan, partiendo de la escala familiar, local, urbana, regional y nacional.